Las cerámicas y porcellanatos símil madera son tendencia

A diferencia de las cerámicas, los porcellanatos extienden su aplicación también al exterior y a superficies con mayor tránsito. Son más resistentes a la flexión y el desgaste. Muchos de ellos, incluso, traen una superficie antideslizante, ideal para colocarlos en galerías, terrazas o zonas contiguas a la piscina.Entre sus propiedades también figuran la resistencia a las heladas, a los bruscos cambios de temperatura (no pierde ni color ni brillo) y a la absorción de agua.

El abanico de posibilidades decorativas que ofrece este material de inspiración natural es bastante amplio y en estos pisos no sólo se imita la gráfica de la madera, también también la textura. Las de maderas rústicas y antiguas, tipo pinotea o maderas más vintage, son las que marcan vanguardia.

El aspecto estético de las placas presenta variaciones de diseño, color y movimiento. Su formato varía de acuerdo a las marcas: 7 cm x 60 cm, 14 cm x 50 cm, 15 cm x 90 cm ó 22 cm x 90 cm, entre las medidas más estándares.

Las piezas pueden ser pulidas o naturales, con estilos que van desde el rústico hasta el clásico.

Aunque la elección del color depende exclusivamente del gusto, los expertos coinciden en que el gris es el tono más elegido para los pisos ya que combina con todo, principalmente con el blanco, negro y natural, y con tonalidades cálidas.

Si el ambiente es clásico conviene optar por porcellanatos claros símil maderas blancas; si es moderno combinarlo con maderas monocromáticas en tonos de negro gris y blanco; y si es vintage, decorarlos con maderas decapadas de colores fuertes, incluso en paredes.

Los porcellanatos también pueden intercalarse con otros materiales. A la hora de dividir un mismo ambiente, se aconseja utilizar cementos alisados o mosaicos calcáreos.

Fuente: Savoia Altolaguirre